Planchar la ropa es un ejercicio de meditación. Ello se
consigue dirigiendo tu pensamiento, en tu camino, pero
¿tienes camino?.
Quizá eres de las personas que piensas que planchar es de
seres inferiores.
Planchar ordena, tranquiliza, sugiere a tu cerebro…..Puede ser un acto creativo…pero
¿tienes camino?
Puedes tener “la misma actitud” con una raya en un pantalón
que con una línea de un cuerpo humano en un dibujo de movimiento. Importa mucho
tu actitud. La actitud del acierto en el “encuentro plástico” puede ser la misma que en la acción de
planchar. Se puede utilizar cualquier otro verbo. Estaremos de acuerdo que es
cuestión de educación.
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